- Conceptos de agresividad y violencia.
La agresividad es la tendencia o disposición a herir, violentar, dañar a otro u otros que no desean acceder libremente a tal acto. Puede ser manifiesta o latente. La agresión es la acción por la cual se ejecuta la agresividad manifiesta. La agresividad es una respuesta adaptativa. Es la capacidad de respuesta del organismo para defenderse de los peligros potenciales, dándose tanto en personas como en animales. Es una conducta que provoca daños corporales o mentales no demasiado graves, mientras que la violencia es una manifestación que implica una conducta destructiva sobre las personas o los objetos y produce una profunda distorsión social. No es una respuesta adaptativa por lo que no se da en animales. Son conductas agresivas que provocan daños graves como ataques, violaciones, robos y homicidios.
Podemos definir como agresión el comportamiento dirigido a dañar o herir a otra persona e implica el deseo de herir lo cual se deduce de lo ocurrido antes y/o después del acto agresor. La violencia se ha descrito como el resultado de la ruptura del equilibrio entre los impulsos y el control interno. Solamente cuando se pierde el control los pensamientos violentos se convierten en actos violentos. La violencia es específicamente humana por cuanto es una libertad que quiere forzar a otra.
- Conductas agresivas conscientes.
- Agresividad reactiva: puede manifestarse en forma de crisis clástica. La personalidad y las estrategias de defensa del paciente condicionan en parte el pronóstico evolutivo de este tipo de reacción agresiva. A veces se da el caso de escapadas hacia adelante en el fóbico en situaciones brutalmente fobógenas que conducen a situaciones peligrosas llamadas valentía cuando acaban favorablemente.
- En el paciente esquizofrénico puede aparecer fuera de cualquier actividad delirante. A veces de una respuesta o de un modo de evitar una intrusión en su territorio, algunos estados de despersonalización ansiógenos conducen a automutilaciones sin deseo de morir. La autoagresividad puede aparecer en relación con los estados depresivos (toma de conciencia de la patología).
- También se observan conductas agresivas congruentes en cuadros de delirios crónicos no esquizofrénicos. Todas las formas de paranoia pueden presentar manifestaciones agresivas. Los pacientes afectos de psicosis alucinatorias crónicas pueden oponerse con violencia a sus alucinaciones auditivas, insultos dirigidos a su persecutor o cualquier acto heteroagresivo posible.
- Perversiones: en algunas perversiones, la expresión de la agresividad es particular, es una búsqueda de placer en relación con un tercero implicado, de manera variable, en la actividad perversa. La agresión solo existe si el tercero no la consiente.
- Alcoholismo: La ingesta de alcohol con el fin de disminuir la inhibición buscada conscientemente, puede llevar a sobrepasar estos efectos y permitir la expresión de una conducta agresiva en el cuadro de una embriaguez manifiestamente patológica.
- Fases evolutivas del ciclo de la violencia.
Fase 1.
- Desobediencia a la autoridad.
- Ausencias escolares.
- Fugas de casa.
- Consumo de alcohol o drogas.
Fase 2.
- Pequeños robos.
- Ataques a propiedades.
- Grandes robos.
Fase 3.
- Intimidación.
- Agresión física.
Así, llegando a la adolescencia:
- Los actos agresivos van aumentando de intensidad.
- Aumenta la violencia colectiva.
- Aparecen por primera vez los ataques a los propios padres y profesores.
- Aparecen las agresiones intersexos.
- Algunos jóvenes se convierten en padres, pudiendo aparecer abusos a sus propios hijos o parejas.
- ¿En qué consiste la reactividad emocional?
Al crecer, los niños con temperamento difícil son los que presentan más problemas para regular sus sentimientos y adaptarse a los cambios del mundo. También tienden a mostrar problemas para regular la calidad de su humor, la intensidad de sus reacciones y el umbral de reacción.
La evolución de este tipo de niños dependerá en gran medida del estilo educativo que utilicen los padres, ya que necesitan de cierta estructuración en las actividades a realizar para que le resulten más predecibles. Los niños extremadamente reactivos tienden a desenvolverse mejor en situaciones más rutinarias.
Las conductas de esos chicos tiende a la escalada cuando aumenta el nivel de activación.
- Riesgos parentales.
Se han estudiado como factores de riesgo parentales aspectos como la depresión materna antes del parto, psicopatología, autoestima, familia monoparental, estresores familiares tales como la masificación de familiares dentro de una misma casa, bajo nivel económico o conflicto matrimonial.
La falta de habilidades sociales y los rasgos antisociales de los padres se consideran los principales contribuidores a la instauración de interacciones coercitivas. En los ambientes familiares coercitivos es frecuente la escasa o nula utilización de técnicas positivas de motivación y de guía en la educación de los hijos. Estos padres no suelen dar muestras de aprobación hacia su hijo, no respetar la autonomía de éste y ser demasiado controladores.
Diversos autores describen a los niños que se ven inmersos en situaciones coercitivas como sujetos que no han aprendido las habilidades sociales necesarias para relacionarse con os demás, no se les ha enseñado a ser disciplinados en la consecución de objetivos ni han aprendido a aceptar las críticas.
Los niños agresivos tienden a atribuir más situaciones hostiles a sus semejantes cuando la situación de provocación es ambigua. Las madres de estos niños agresivos tienden a realizar más atribuciones de hostilidad a las conductas de sus hijos, atribuyen la mala conducta del niño a rasgos de personalidad negativos, responsabilizan más al niño por su conducta, se sienten más heridas por esas malas conductas y utilizan una disciplina más dura para intentar evitarlas.
La falta de implicación de la madre en su relación con su hijo no parece guardar relación con las conductas agresivas de los niños. Sí se da una fuerte relación entre la agresividad infantil y los problemas psicosociales maternos.
- ¿Cuáles son las causas de la agresividad escolar?
En la escuela los niños pueden aprender claramente a ser agresivos si son recompensados por dicho comportamiento, y esto sucede con frecuencia en el ámbito escolar entre iguales.
Los niños no suelen aprender respuestas nuevas y originales tras la observación de un modelo de agresión, sino que las respuestas agresivas que ya existen en el repertorio del niño pueden producirse con mayor probabilidad, produciéndose una desinhibición de la conducta de agresión latente.
En la escuela, situaciones como una exigencia excesiva de los programas y los contenidos educativos, las excesivas horas de clase formal, la limitación de movimientos durante largos periodos de tiempo etc., no suelen tener en cuenta las necesidades, los intereses y el momento evolutivo del niño y crear malestar en los niños propiciando la aparición de comportamientos hiperactivos y de conductas de descarga agresivas.
La figura del maestro es de vital importancia ya que actúa como modelo del menor. Éste debe saber manejar su propia angustia cuando las cosas no funcionan al ritmo que quisiera y ha de mantener control del ambiente de la clase y de los alumnos para que la concentración que se requiere en todo proceso de aprendizaje no se deteriore. La representación que tiene el profesor de sus alumnos puede llegar a modificar el rendimiento y el comportamiento real de los alumnos en dirección de las expectativas asociadas con dicha representación o bien también en sentido inverso.
Manuel Bobis Reinoso.