Para muchas personas ir al psicólogo es sinónimo de ser una persona débil, pero en realidad, acudir a terapia psicológica te puede convertir en una persona más fuerte emocionalmente, y te puede aportar herramientas para poder adaptarte mejor a las situaciones difíciles que pueden presentarse al largo de tu vida.
¿Cuándo acudir a un psicólogo?
Por tanto, acudir a terapia es un acto de inteligencia y de valentía, ya que en muchas ocasiones la persona que necesita ayuda no es consciente de que tiene el problema o evita afrontar la realidad. Muchas personas desconocen aún en qué momento deberían pensar en acudir a un psicólogo, sobre todo por las falsas creencias sobre qué es la psicoterapia y a quién va dirigida. En este sentido, te recomiendo que leas este artículo:
Un psicoterapeuta es un profesional de la salud mental especializado en las áreas cognitiva (pensamiento), afectiva (emociones) y comportamental (conducta), y que te puede ayudar a empoderarte frente a las circunstancias del día a día y a mejorar tu calidad de vida.
Por eso, a continuación te presentamos los beneficios que aporta la terapia psicológica.
1. Te ayuda a sentirte mejor
Al enfrentar junto a un psicoterapeuta aquellos problemas que te causan dolor o malestar, y poder hablar con confianza y con libertad sobre uno mismo a alguien que no te juzga sobre tus sentimientos y tus experiencias reprimidas, estás dejando expresar tus pensamientos y sensaciones ocultos, lo cual es beneficioso para el bienestar.
Cuando le expresas cómo te sientes y liberas tu carga emocional, te sientes aliviado. Esto se conoce como catarsis, una palabra griega que se refiere a purificación y es usada en psicología para explicar el proceso de liberación de las emociones negativas.
2. Te enseña herramientas para manejar conflictos
Los conflictos son algo normal en la vida de las personas y, en muchas ocasiones, son necesarios para el crecimiento personal o la convivencia con otros individuos. Las sesiones de psicoterapia te enseñan nuevas maneras (más adaptativas) de solucionar problemas.
Además, te puede ayudar a percibir los conflictos de forma distinta, para que te afecten menos yseas capaz de relativizar la importancia de las situaciones tensas. De esta manera, tu forma de adaptarse a las circunstancias novedosas del día a día será mucho mejor y, en general, tendrás menos dificultades en tus relaciones personales o incluso en el ámbito profesional.
3. Te ayuda a cambiar las creencias limitantes
Con nuestras creencias y valores damos significado y coherencia a nuestro modelo de mundo. Una misma situación puede ser vivida de forma distinta por cada persona. Las creencias nos ayudan en definitiva, a simplificar el mundo que nos rodea, y son interpretaciones de la realidad y no hechos constatados.
Algunas creencias son desadaptativas o limitantes y es necesario corregirlas, pues éstas no son innatas, las vamos adquiriendo a lo largo de nuestra vida. Por ello, el psicólogo puede ayudarte a identificarlas, analizarlas, ponerlas a prueba y modificarlas.
4. Te ayuda a vivir en armonía contigo mismo y con los demás
La introspección que se lleva a cabo al asistir a terapia te permite conocerte mejor y superar, por ejemplo, una crisis existencial. Además, la psicoterapia es efectiva para los problemas laborales (burnout, estrés, etc.) o los problemas de pareja.
Por tanto, la terapia psicológica puede ayudarte a solucionar este tipo de problemas, y es beneficiosa para encontrarte a ti mismo y para relacionarte con los demás de manera más efectiva. Esto va a afectar positivamente a tu salud mental, y te permitirá encontrar la paz interior y el bienestar.
5. Confidencialidad de las sesiones
La relación con el psicólogo es confidencial y estrictamente profesional. Tal y como se expresa en el código ético y deontológico del Colegio Oficial de Psicólogos, el profesional de la psicología debe garantizar el secreto y la confidencialidad de todo lo referido por quien le consulta.
Por tanto, todo lo que digas en una sesión terapéutica será un secreto entre tu terapeuta y tú. Esto permite que haya un marco relacional en el que se pueden tratar miedos muy íntimos.
6. Relación de confianza y empatía
Además del conocimiento y la profesionalidad que debe mostrar el psicólogo, el entorno de confianza que se crea entre ambos te va a permitir expresar los problemas y sentimientos que consideras más delicados (y que posiblemente no le contarías a nadie más).
El psicólogo no te va a juzgar y, además, tiene la formación necesaria para crear un buen entorno de confianza y empatía para que te expreses sin temor.
7. Asesoramiento profesional
El psicoterapeuta es un experto en la terapia psicológica, y tiene amplios conocimientos sobre la conducta humana, pues ha cursado sus estudios de psicología en una universitaria reglada. Para llegar a trabajar de psicoterapeuta, es muy posible que haya cursado algún posgrado universitario sobre alguna especialidad (por ejemplo, sexología, terapia de pareja o psicología clínica), y seguramente haya adquirido la experiencia necesaria para poder aportar todo su conocimiento en tu beneficio.
La terapia psicológica no es contarle los problemas a un amigo o familiar, pues existe una base sólida (tanto teórica como práctica) avalada por la ciencia.
8. Te empodera frente a la vida
Uno de los objetivos de la psicoterapia es que la relación entre el terapeuta y el paciente no sea de dependencia. Por tanto, el psicólogo te ayuda a ser dueño de ti mismo y a adquirir nuevas habilidades que te serán útiles en el día a día.
Asistir a terapia psicológica no es esperar que el psicólogo te solucione los problemas, es aprender a aceptar y amar lo que uno es y poner la voluntad necesaria para cambiar lo que nos causa malestar o nos impide crecer.