El desarrollo tecnológico actual hace que las relaciones de pareja afronten problemas nuevos.
Las relaciones de pareja han sido, a lo largo de la historia, un tema de gran interés para el ser humano. Infinidad de autores han reflexionado, estudiado y escrito sobre el tema desde diferentes perspectivas y ámbitos. Sin embargo, parece que con la llegada de las nuevas tecnologías la forma de relacionarnos a nivel de pareja está cambiando considerablemente.
En este artículo abordaremos diferentes desafíos que pueden encontrarse algunas parejas en esta era digital en la que vivimos. Hablaremos sobre las dificultades en la comunicación y la importancia de las redes sociales y su efecto sobre la privacidad. Además, también exploramos aspectos como la desconexión emocional y la dificultad para comprometerse.
Los desafíos en la comunicación digital
Teniendo esto en cuenta, son muchas las parejas que, hoy en día, dependen de una u otra forma de comunicación digital para estar en contacto. Este hecho, sin duda, puede contribuir a que se produzcan un mayor número de malentendidos. Se pierden aspectos cruciales en la comunicación relacionados con toda la parte no verbal.
Además, las pantallas nos alejan emocionalmente de las otras personas, aunque sean vínculos significativos, y esto puede llevarnos a comunicarnos de una forma menos empática, respetuosa y, en definitiva, asertiva. A la vez, la pantalla nos da cierta «seguridad» y, de este modo, incrementan las probabilidades de evitar cada vez más las conversaciones en persona.
Por último, es importante resaltar que la era digital se caracteriza, entre otras cosas, por la inmediatez y, por supuesto, afecta a la comunicación. En muchas ocasiones los conflictos se derivan a causa de las expectativas sobre la rapidez en la respuesta de los mensajes.
Las redes sociales y la privacidad
En relación con las redes sociales y la privacidad, son diversos los puntos a destacar. Por un lado, puede darse un incremento de celos o conductas controladoras al disponer de un fácil acceso al contenido que la pareja comparte sobre su vida y su día a día.
Por otro lado, si la pareja decide exponerse y compartir su relación en redes sociales, también pueden generarse con facilidad comparaciones con otras parejas. Algunas personas pueden sentir que su relación carece de intimidad y privacidad si se muestran con exceso en las redes. Además, al compartirse en redes, las parejas se exponen a recibir comentarios ajenos que pueden interferir en la relación.
La línea entre lo privado y lo que se muestra en público puede volverse muy fina y conllevar problemas en la relación. Mientras algunas personas tendrán una mayor necesidad de no compartir, otras pueden vivir este hecho como una falta de compromiso o algo por el estilo. Algunas personas pueden sentirse inseguras si sus parejas no las muestran en redes.
La desconexión emocional
En términos generales, se suele pasar mucho tiempo delante de las pantallas, haciendo un consumo poco saludable de las tecnologías. Este hecho puede interferir en muchos aspectos de nuestra vida y, desde luego, la pareja es uno de ellos. Invertir mucho tiempo en la tecnología puede disminuir el tiempo de calidad que pasamos en pareja.
Lamentablemente, no es poco frecuente que la tecnología esté presente cuando pasamos tiempo con nuestros vínculos significativos. Este hecho puede llevarnos a tener una comunicación más superficial, menos profunda, que dé lugar a distracciones, malentendidos e incluso la pérdida de momentos significativos.
Además, vivir en la era digital, inmersos en el uso de la tecnología, puede llevarnos a una sobreexposición a información y la consecuente desensibilización emocional. Por ello, es crucial poder dedicar tiempo de calidad a la pareja en el que la tecnología y las distracciones no tengan cabida. La práctica de la presencia y de la atención plena pueden ser aliados.
La dificultad del compromiso en la era digital
La cultura del consumismo, de la inmediatez y la necesidad de sentirnos constantemente estimulados puede complicar mucho el hecho de encontrar una persona con la que queramos construir un proyecto de futuro e invertir los recursos necesarios en dicho proyecto. Parece que las relaciones interpersonales se asemejan cada vez más a productos.
Muchas personas tienen dificultad para quedarse en las relaciones cuando sus expectativas no se cumplen y, en lugar de trabajar para reparar y seguir construyendo el vínculo, deciden seguir explorando otras opciones. Está claro que no debemos mantener relaciones cuando hay dinámicas de abuso y maltrato, pero también es cierto que, en la actualidad, hay muchas dificultades para comprometerse y construir.
Además, el fácil acceso a conocer a otras personas también puede debilitar el compromiso en la relación de pareja puesto que son una fuente de gratificación y estimulación constante. Indudablemente, este hecho puede erosionar la relación de pareja a medio-largo plazo. Asimismo, podría considerarse que el uso de las tecnologías también es una nueva ventana a otras formas de cometer infidelidades y mantener dinámicas disfuncionales y dañinas.
Fuente: https://psicologiaymente.com/pareja/desafios-en-era-digital-para-relaciones-de-pareja